domingo, 30 de junio de 2013

CENSO AGROPECUARIO

Se viene el Censo Agropecuario 2013 y, al respecto, las preguntas que tenemos son más de las que el propio censo tendrá registradas en sus boletas. 

Sobre la mecánica del censo, uno se pregunta…¿cómo se hará el censo?, ¿qué área cubrirá cada censor —que no debe ser lo mismo que cesante ni censurador?,  ¿qué preguntarán?, ¿querrán verificar lo que pregunten, o darán por buenas las respuestas que reciban?  ¿Será un censo sin censura, o será un inventario de bienes inventados?

Precisamente sobre lo que medirán también hay miles de preguntas, pero aquí solo ponemos algunas, por falta de tiempo y espacio, y escogemos las más simples, como para reírnos un poco de las posibilidades y combatir la tensión que el censo puede estar creando…

Se ha dicho que se registrarán también las maquinarias e instalaciones. Entonces… ¿irán a contar las rejas, tranqueras y mataburros? Si lo hacen, que tengan mucho cuidado ¿Querrán saber sobre los palos de gallinero? Si lo hacen, que lo hagan con mucho cuidado. ¿Irán a contabilizar los millones de kilómetros de alambrado adquiridos a puro esfuerzo privado? ¿Irán a registrar lo no alambrado para avisarles a los que andan buscando dónde meterse? ¿Contarán los aeromotores, los silos, los chorizos blancos, los noques, atajados, bretes, corrales, las bolsas, los azadones, palas y machetes, las bicicletas, las bombas de agua, los galpones, las letrinas, las horquillas, los rastrillos, las guadañas, los tachos, las pirguas y los trapiches?

¿Contarán los establos?...yo tengo uno, aunque muy urbano y tan conversado que con la entrega de hoy ya van 78 reuniones semanales en este nuestro muy urbano y rural establog.

¿Contarán los pluviómetros?, yo tengo uno, pero en la ciudad.  A pocas horas de cumplirse los primeros seis meses del calendario 2013 —no del año agrícola—,  mis registros son los siguientes: enero 93,3 mm, febrero 70 mm (enero poco, febrero más poco aún), marzo 167 mm, abril 176 mm, mayo 199,5 mm (marzo loco, abril locango, y mayo más loco aún), y junio  115,5 mm (sin contar la que está cayendo hoy en Hamacas y que yo estoy observando caer desde mi hamaca desde hace un par de horas), lo que hasta aquí hace un total de 821,3 mm y me da como resultado un medio año un poco loco.

Y cuando pregunten sobre la producción…, ¿querrán datos de las gallinas muertas y sus precios de gallina muerta?, ¿estarán interesados en lo que dicen los pollitos?, ¿contarán a las medias naranjas, que en el llano tenemos por docenas?, ¿nos chuparemos todos un limón?, ¿indagarán sobre lo que se quedó sin sembrar y lo que se quedó sin cosechar?, ¿consultarán sobre las gallinas  que se comió el zorro, sobre las vacas que les picó la víbora, se comió el tigre o se llevó la sequía, la inundación y/o la bestia peluda del abigeato?

Y cuando consulten sobre las tierras, ¿preguntarán quién hizo el esfuerzo de habilitarlas para el cultivo o la cría?, ¿querrán saber quién las ha defendido de los invasores de lo ajeno, de los amigos del mínimo esfuerzo, de los comedidos con lo que ya está hecho?, ¿averiguarán  quiénes se han mantenido fieles y firmes tanto en años de bonanza como en décadas de vacas flacas?, ¿estarán interesados en saber qué pasaba cuando la caña, el arroz, el maíz y la soya  no valían nada? Querrán saber los brillantes y supuestos responsables de que los precios internacionales de los ‘commodities’ se hayan acomodado que desde siempre hubo gente que estuvo allí y aquí aguantando el chaparrón, el aguacero y el diluvio antes de que los que miden conozcan siquiera la palabra ‘romeplow’?   

Cuando se terminen de contar las hectáreas de cada cultivo, las cabezas de cada ganado, la maquinaria, las instalaciones de las haciendas y las de la industria relacionada, y la infraestructura, ojalá sepan que donde más se produce es  donde está la gallina de los huevos de oro, y que es donde más hay que apoyar para que la ponedora no se muera, para que su producción no se caiga porque es la que le da de comer al país, que no somos una Venezuela Saudita donde —aunque les debiera dar vergüenza—,  lo pueden comprar todo de afuera.

Cuando se termine de medir todo, ojalá que todo se traduzca en una correcta asignación de recursos a las regiones, que todo resulte en una correcta y actualizada reasignación de escaños parlamentarios, y los potros y los padrillos pasemos a ocupar los curules que nos corresponden. Que se tenga mucho cuidado al contar los burros, que no se olviden de los que se subieron al corredor, que no hagan pasar dos veces a la misma tropa de vacas, que cuenten las cabezas y no los cuernos.

Que se mire con cariño y no con odio o envidia a donde está la agricultura y donde está la pecuaria extensiva que depende de la agricultura porque se alimenta de granos o sus subproductos. En otras palabras, que se mire con justicia a donde se produce el alimento que depende del alimento, el cerdo y el pollo que dependen del grano, o del alimento balanceado que se produce donde se produce el grano.

Ya está por llegar el censo, open las tranqueras!, se quiere saber how many vacas y cuántos toros somos los torazos.  Ya llega el censo, y Acragilo Cagaroli está aquí, listo, esperándolos.

riopalo1962,@gmail.com