miércoles, 4 de enero de 2012

NUEVOS RUBROS AGROPECUARIOS

En mis cortos y tiernos casi cuarenta y diez años de edad, creo que puedo considerarme un testigo presencial y directo del surgimiento de rubros agropecuarios que ahora son puntales del desarrollo y la economía de la región.

Por supuesto que no me considero fundador de todos los rubros agropecuarios ni mucho menos, pues en tiempos anteriores a mi entrada en escena nuestros antepasados indígenas y, sobre todo, los no indígenas, ya cultivaban la caña de azúcar, el maíz, el arroz, la yuca, el frejol, el café, el cacao, el guineo y el plátano, y muchos otros cultivos menores y de subsistencia, pues desde siempre se produjo para alimentar a la casa y a los propios, y fue el crecimiento de la demanda interna y externa el que indujo a pensar en sacar productos fuera de Santa Cruz y exportar, sin descuidar nunca el mercado local.

De la misma forma, las crías de animales domésticos ya existían largamente antes de que yo irrumpiera en el escenario de la vida, y no me creo para nada testigo de la introducción y cría de vacas, puercos, ni gallinas, ni me considero testigo de la primera vez que se hicieron corrales, bretes ni gallineros.  

Eso sí, soy de la generación que presenció y puede testimoniar la instalación de los primeros cultivos industriales de algunos de los rubros agropecuarios que hoy sustentan buena parte de nuestra economía como la soya, el sorgo, el trigo, y el algodón, que se instalaron en nuestro medio cuando yo hacía mis primeros pininos, allá por el inicio de los años sesenta. En el área pecuaria, hago parte de la muchachada que acompañó la instalación de las primeras explotaciones  lecheras industriales, así como de la ganadería bovina intensiva mediante el confinamiento, y de la cría de parrilleros y ponedoras a nivel masivo y moderno, entre otras.

De la misma forma, en estos días observo con gusto cómo van surgiendo nuevos rubros y −como ya he dicho en mi libro “El Establo” −, cómo cada nuevo rubro muy pronto adquiere carácter de tradicional y de inmediato se le inventa una fiesta, con elección de reina y todo.  “El Establo” está disponible gratuitamente en este blog, así que bájeselo y lea el artículo pertinente (“Las ferias y fiestas productivas”), y todos los demás.

Tan observador soy del tema, que me considero un especialista,  e inclusive me atrevo ya a ofrecer mis servicios de consultor, sabedor de que en esta columna seriamente humorística, alguno de los nuevos rubros que yo proponga van a encontrar terreno fértil y pronto se van a convertir en nuevos rubros tradicionales, con fiesta nacional, reina nacional y con exportaciones, inclusive.

Periódicamente presentaré nuevos rubros y dejaré nuevas sugerencias, pero hoy nos quedaremos solamente en la mención del primer nuevo segmento agropecuario a ser presentado en la próxima entrega de este blog: la producción de sepeculones.  Aguárdenos, pues, un par de días y le volveremos a aparecer con el desarrollo del tema.

riopalo1962@gmail.com